PESO SALUDABLE: se trata más de la calidad, que de la cantidad
Un peso saludable no se trata de la cantidad de kilos en relación con la altura, sino de la calidad de estos kilos en relación a la composición corporal. Por consiguiente, un peso saludable está relacionado con una composición corporal saludable, donde hay un equilibrio entre la masa grasa y la masa magra (principalmente, músculo) de todo el cuerpo.
Llegar a tener una composición corporal saludable es importante para el funcionamiento, la movilidad y la vitalidad óptimos del cuerpo, y también para la calidad de vida. Las investigaciones confirman cada vez más que una composición corporal poco saludable está relacionada con mayores riesgos de sufrir diabetes tipo 2, síndrome metabólico, enfermedades cardiovasculares y sarcopenia, y, por lo tanto, genera consecuencias graves y a largo plazo para la salud.
CONTROL DEL PESO: Un desafío doble
Para muchas personas, los enfoques para el control del peso incluyen el reto doble de:
- Pérdida de peso: Llegar a un peso objetivo perdiendo kilos/grasa
- Mantenimiento del peso: Mantener el peso objetivo después de una pérdida de peso exitosa.
El músculo representa la mayor parte de la masa magra del cuerpo y consume eficazmente la energía (quema calorías). Por consiguiente, ganar o perder masa muscular acelerará o reducirá el gasto energético del cuerpo. Las estrategias saludables para la pérdida del peso deben reducir eficazmente la masa grasa y mantener o preservar la masa muscular.
La nutrición modula su cuerpo
Junto con el hábito de un estilo de vida activo, la nutrición es una herramienta esencial para modular la composición corporal, independientemente del objetivo de aumentar el músculo o disminuir la grasa.
Diversos trabajos científicos han demostrado que la introducción de dietas con mayor contenido de proteína que incluyen proteínas de alta calidad –como el suero– ayudan a fomentar el control del peso y a mejorar la composición corporal (por ejemplo, pérdida de grasa corporal y/o conservación del músculo).
Los lácteos contienen diversos compuestos nutricionales que ofrecen un efecto beneficioso adicional en relación con los enfoques para el control del peso y para un peso saludable como proteínas de alta calidad y calcio.
La ventaja de la porteína de suero para un peso saludable
Las investigaciones demuestran que la ingesta de proteína de suero sirve como una herramienta valiosa para el control del peso exitoso.
Las proteínas de suero son proteínas muy nutritivas y completas, lo que significa que proporcionan todos los aminoácidos esenciales (EAA) que el cuerpo humano necesita. En comparación con otras fuentes de proteínas, las proteínas de suero brindan una mayor proporción de EAA y, en particular, de aminoácidos ramificados (BCAA), de los cuales se ha comprobado que estimulan eficazmente la síntesis muscular. Además, las proteínas de suero son de fácil digestión y de fácil absorción por el cuerpo humano.
Durante la pérdida de peso, la proteína de suero ayuda a reducir el peso corporal, la circunferencia de la cintura y la masa grasa, mientras preserva la masa corporal magra.
La proteína de suero también ayuda a disminuir el apetito y a desarrollar masa muscular magra. La α-lactoalbúmina es una proteína de suero única, especialmente rica en triptófano, EAA, y se ha comprobado que tiene un efecto mayor en la saciedad.
La ventaja del calcio de la leche para un peso saludable
Se sabe que los lácteos son una fuente dietaria rica en calcio de la leche y en otros compuestos como proteínas, minerales y vitaminas que fomenta la salud general y beneficia el desarrollo óseo.
La leche del calcio presenta biodisponibilidad, o sea que puede ser absorbida y utilizada por el cuerpo. Numerosos estudios apoyan la hipótesis de que una mayor ingesta de calcio de la leche tiene una influencia positiva en el peso corporal y en el mantenimiento del peso.
Se cree que la ingesta de calcio de la leche proveniente de productos lácteos puede ayudar a reducir el peso corporal y a fomentar el mantenimiento del peso, al regular el metabolismo de la grasa y al promover una mayor excreción de grasa/energía en el intestino en relación con una comida con alto contenido de grasa.
